¿Cómo podrá la banca afrontar las demandas de las nuevas generaciones? potencializando fortalezas

Ya sea por las necesidades del mercado, por la globalización o por estar a la vanguardia, la banca se ha caracterizado por ser uno de los sectores con mayor impulso en la adopción tecnológica. La inversión y desarrollo han sido una constante en los últimos años. Sin embargo, los consumidores modernos también demandan nuevos servicios y quieren que suceda rápido. Entonces, ¿qué hacer con lo que ya se tenía y cómo aprovecharlo para llegar a Open X?

Las nuevas generaciones de consumidores, encabezados por los millennials, cada vez ocupan un lugar más relevante en la economía global y un aspecto que los caracteriza es su parámetro para adquirir servicios, el cual está orientado en reconocer el valor de las experiencias, especialmente cuando se integran a su vida diaria y la simplifican.

De acuerdo con indicadores arrojados por el World Retail Banking Report (WRBR) 2019[1], de Capgemini y Efma, las tres razones principales por las que los clientes recurren a productos financieros no tradicionales son: menor costo (70%), facilidad de uso (68%) y un servicio más rápido (54%).

Adicionalmente, el mismo estudio (WRBR 2019) indica que 75% de los consumidores expertos en tecnología utilizan al menos un producto financiero de las Bigtechs y más del 80% de los millennials están utilizando pagos, tarjetas o productos de cuentas bancarias de Bigtechs o nuevos bancos completamente digitales (challenger Banks). De esta forma se puede constatar que ha comenzado una ola que pone de manifiesto cierto nivel de vulnerabilidad de la banca tradicional al perder clientes frente a los nuevos jugadores en los tres grandes pilares de su operación: intermediación de pagos, colocación de préstamos en distintas modalidades e incluso captación de recursos.

Considerando que las demandas actuales giran en torno a tener un mercado compartido, impulsado en primera instancia por la Banca Abierta, la banca tradicional debe comprender que una innovación interna y aislada generaría pérdidas de oportunidades y una menor participación en el mercado. Por ello, la propuesta de acción que trae consigo la Apertura extendida de la banca (Open X) contempla maximizar las fortalezas ya existentes y con ello apalancar la colaboración con los nuevos actores del sector para, en conjunto, resolver de manera integral el bienestar financiero de los consumidores.

Para lograrlo, la banca tendrá que mejorar sus capacidades internas, al tiempo que trabaja en colaboración con las FinTechs y BigTechs. El objetivo debiera ser acelerar la innovación y evolucionar de la segmentación y microsegmentación en la que se acostumbra a trabajar, a la resolución de necesidades más particulares, a experiencias más personalizadas. Para ello, los bancos requieren elegir de manera estratégica a los socios que complementen su portafolio de productos, de tal manera que se puedan beneficiar al obtener lo mejor de los dos mundos y aumentar su índice de credibilidad y confianza frente al público.

En síntesis, la Apertura extendida de la banca (Open X) es una práctica proactiva de colaboración con FinTechs y BigTechs, que impulse la excelencia en el uso de datos compartidos y que fomente un intercambio continuo de recursos para lograr, tanto una mejor experiencia de clientes como una innovación acelerada de productos y servicios.

[1] World Retail Banking Report 2019, URL: https://www.capgemini.com/co-es/resources/world-retail-banking-report-2019/